11 sept 2013


Ya he visto todo
lo que estos ojos puedan ver;
he visto la sangre,
he visto el odio,
he visto al sol caer.

No quiero más aquí.
Ya he sentido todo,
lo que esta alma  pueda soportar.
Ya he mentido tanto,
que me convertí
en lo que odiaba ser.

Ya he oído tanto
que mis oídos sangran
y mis manos tiemblan,
por que así como quiero irme
no encuentro consuelo
en una eternidad
sin tocar
tus manos.

8 comentarios:

  1. Muy bello. Me hiciste acordar cuando mi mamá me contó la historia de Alfonsina cuando haciamos un viaje en auto y escuchabamos el tema de Mercedes.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. no hay historia más solitaria y poética que la de esta mujer

      Eliminar
  2. La doble moral de un corazón (palabra naif si las hay), quiere tener fortaleza, quiere ser dueño de su propio destino, ese es el camino difícil, el fácil es seguir intentando lo imposible, golpearse contra una pared, que aunque duela siempre sera el camino mas fácil, la salida VICTIMA antes que la salida SOLEDAD. Para no sentirse solo, basta con tratar de aferrarse a algo. El solo intento nos reconforta, nos da un destino.
    Saludos y perdón por las incoherencias.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. la racionalidad vs los sentimientos. las peleas más grandes y temibles de cada cuerpo.
      incoherencias son otras

      Eliminar
  3. "Ya he mentido tanto,
    que me convertí
    en lo que odiaba ser."

    Totalmente de acuerdo, las incoherencias son una constante en ciertos momentos de la vida. Aun cuando parecemos estar tan seguros de nosotros mismos.

    ¡Genial tu estilo, te sigo!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. pasamos luchando toda la vida para no ser algo a lo que parece estamos destinados ser
      gracias princesa, saludos para usté!

      Eliminar
  4. Uff, totalmente de acuerdo, al final a quien mas mentimos somos a nosotras.

    Abrazo Nele

    ResponderEliminar